Resguardo policial se mantuvo en cementerios de la urbe capitalina

Este 2 de noviembre, en conmemoración del Día de los Difuntos, un importante contingente policial se desplegó en varios sectores estratégicos de la urbe quiteña, para permitir el normal tráfico vehicular y movilización de las personas que acudieron masivamente a los cementerios de la capital.

El coronel Neyb Jiménez, comandante del Distrito Manuela Sáenz, encargado del operativo de Seguridad en el sector del cementerio de San Diego al centro de Quito afirmó que no se presentaron inconvenientes con la ciudadanía ya que se ha mantenido un patrullaje permanente en todo el perímetro, tanto en el interior como en los alrededores de las calles Francisco Farfán y la Ermita, destacó Ruíz.

Además, la autoridad resaltó que alrededor de 50 efectivos policiales entre aspirantes, Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM), clases y policías, resguardaron la Seguridad Ciudadana de las personas que acudieron, desde las 08h00, masivamente a visitar a sus seres queridos fallecidos.

El único caso especial, informó la autoridad policial, fue el de una persona que se desmayó por problemas de salud y recibió atención permanente del personal policial. El ciudadano fue inmediatamente trasladado a una casa de salud, agregó Jiménez.

Cabe destacar que este cementerio se observó una gran cantidad de vehículos, en su mayoría, particulares. De estos se bajaban las personas para visitar la tumba de sus seres queridos. Con flores, tarjetas y serenatas que ingresaban a este espacio que estuvo abierto desde las 08h00 hasta las 17h00.
En otro punto de la capital, en el Cementerio del Batán, el teniente Emanuel Salazar, jefe del Operativo de Seguridad, señaló que alrededor de 30 uniformados mantuvieron patrullajes permanentes en los ingresos y salidas de las personas de este panteón.

Además, sostuvo que con personal de la Policía Judicial se realizó controles en las calles de los Laureles, de las Bugambillas y Eloy Alfaro, sin presentarse ninguna novedad.

El único inconveniente presentado, resaltó Salazar, fue que se impidió el ingreso de personas que se encontraban en estado de embriaguez, pero ello fue controlado inmediatamente por los uniformados, quienes cumplieron con éxito el procedimiento, sostuvo la autoridad.

Salazar señaló que se mantuvo el orden, control y seguridad de la ciudadanía dentro de este cementerio y en los alrededores. Además, manifestó que estas tradiciones no se pueden perder porque son parte de la identidad de los ecuatorianos y refuerzan el sentimiento de cariño de las familias.

Opinión ciudadana
Por otra parte, Carlos Martínez, uno de los visitantes al cementerio del Batán, indicó que ve con agrado la presencia de personal policial, ya que ello permite mayor seguridad en la ciudadanía. “Ahora puedo visitar con toda mi familia a mi madre y dejar con tranquilidad el vehículo estacionado afuera, sin miedo a que los accesoristas se roben partes del vehículo”, agregó Martínez.

Ellos arreglaron el nicho y lo adornaron con flores sintéticas, naturales y tarjetas. De su parte María Quelal, dijo que el patrullaje policial fomenta seguridad en las personas y genera mayor tranquilidad en esta fecha, ya que existe gran movilidad de personas.

Ella dejó flores a sus cuatro familiares que ya no están. Para ella es importante recordar a sus seres queridos, porque fueron parte esencial en su vida. “No solo se les recuerda en esta fecha, sino cada día”, resaltó Quelal.Redacción A.R/Quito/MDI/DNCE.