Aspirantes a policía tienen una formación integral

Danilo Ayoví, alumno de la Escuela de Formación de Policías de Guayaquil, escuchaba atento la cátedra de legislación y derechos humanos que le impartía el profesor Armando Madero, la mañana de este miércoles. “Conocer el código de procedimiento penal para nosotros es elemental ya que en eso se basará nuestra actuación, es obligación nuestra saber las leyes que le amparan a los ciudadanos para no vulnerar sus derechos”, manifestó el joven.

El pedagogo Armando Madero explicó que si bien los alumnos no van a ejercer como abogados, es necesario que tengan claro la aplicación de las normas pues a ellos les corresponderá ponerlas en práctica. “Es una materia profunda que requiere ser analizada punto por punto, reciben clases sobre esta materia en dos jornadas, a medida que van comprendiendo les hago preguntas y hasta el momento estoy complacido porque es un grupo que responde bastante bien”, indicó.

En la Escuela de Formación de la Policía de Guayaquil, ubicada detrás del complejo de la Policía Judicial de la Zona 8, se forman al momento 78 aspirantes, dividido en dos grupos para recibir las capacitaciones. Durante su jornada tienen un horario que cumplir que incluye clases de computación, educación física entre otras actividades.

El Director de la Escuela, el mayor Santiago De Mora, relató que existen al momento 20 personas a cargo de los estudiantes entre profesores e inspectores, “Nosotros nos responsabilizamos no sólo de impartirles las materias sino de formar también su disciplina, de brindarles la seguridad que merecen y ofrecerles un ambiente ameno”, finalizó.

En la otra aula, el cabo primero Antonio Guaicha, instructor, aprovechaba la mañana para explicarles sobre el uso adecuado del equipo de dotación que les dan a los uniformados al graduarse. “Es importante que sepan alumnos que el tolete no se les da para que golpeen a la primera persona que les grite, todo lo contrario, sólo se lo utiliza como un arma de defensa en caso de ser agredidos, de que su vida corra peligro, es para el uso represivo de la fuerza”, manifestó.

Ronald Almeida, estudiante, considera que el don de colaborar con los demás inicia en las aulas demostrando un buen compañerismo. “Trato de ayudar a otros aspirantes, pues en el futuro seremos colegas, habrá momentos en que ellos me protejan durante actuaciones policiales y otros en que yo haga lo mismo, conocerlos y tratarlos bien es mi deber desde ahora”, manifestó. / Min. Interior /DNCE / M. Rojas