Azuay
Más de 11 kilos de droga hallados durante operativo en Cuenca
La Jefatura de Antinarcóticos en el Azuay detiene a los vendedores de droga en las calles, pero también se enfoca en los operativos de control en los diferentes correos paralelos de la ciudad, lo que dejó como resultado el decomiso de 11,21 kilos de cocaína, cuyo destino era los Estados Unidos.
En la revisión al primer courier se encontró en una encomienda, una funda plástica con varias prendas de uso personal, como chalinas, bufandas, bolsos con artesanías y camisas, artículos que despertaron la sospecha de los agentes.
Identificación
Los uniformados realizaron las pruebas de identificación preliminar homologada y descubrieron que las prendas estaban impregnadas de droga, específicamente cocaína, con un total de 3,74 kilos, que equivaldría a más de 50.000 dólares retirados del mercado.
En el segundo correo paralelo encontró una encomienda llena de bolsos de lana, de igual manera impregnados con 2,39 kilos de cocaína. La cantidad de droga equivaldría a más de 35.000 dólares
En el último courier revisado, encontraron dos encomiendas enviadas por la misma persona. Con la misma modalidad, la droga estaba introducida en varias prendas de vestir, que al recopilar dio un total de 5,08 kilos de cocaína, que equivaldría a más de 76.000 dólares.
Al parecer las encomiendas, ubicadas en tres diferentes courier, fueron enviadas por la misma persona debido al modo de camuflar la droga, cuyo destino era Nueva York, Estados Unidos.
El coronel Marco Ponce, jefe de Antinarcóticos, explicó que el trabajo es coordinado con los gerentes de correos paralelos, para revisar las encomiendas sospechosas. Con la debida autorización abren cartones, bolsos, fundas y todo tipo de encomienda, con el fin de que no exista la mínima posibilidad de que exporten droga.
Astucia del camuflaje
La astucia de las personas que intentan ingresar droga al Centro de Rehabilitación Social no tiene límites, es así que la Policía detuvo a una mujer oriunda de Quinindé, quien intentó ingresar al reclusorio con un paquete de cocaína introducido en sus partes íntimas.
Al observar la presencia de los policías, evitó el registro y salió del lugar. De inmediato, los agentes la detienen en la calle Estévez de Toral, donde la registran y de manera voluntaria indicó que entre sus partes íntimas tenía un preservativo lleno de droga, por lo que fue detenida por la posesión de 173 gramos de cocaína, que equivaldría a 2.595 dólares retirados de la venta ilegal. /Redacción Azuay. DMI-DNCE
