Festejo de cumpleaños de un padre policía a un hijo en tiempo de cuarentena

“La crisis sanitaria por la cual está atravesando el país y el mundo no ha impedido demostrar el lado humano de los caballeros y  damas de la paz, quienes al igual que el resto de personas, somos padres, hijos, hermanos”, fueron las palabras de Luciano Eduardo Cajamarca Jácome, servidor policial oriundo de Quito, quien tiene 12 años de servicio a la comunidad, de los cuales 10 ha pasado en el Centro Regional de Adiestramiento Canino (CRAC) como instructor de canes, además forma parte del Grupo de atletas de Fisicoculturismo de la Policía Nacional.

El joven policía, cuenta que ingresó a la Institución motivado por patriotismo y  vocación de servicio, cuando tenía 22 años, cumpliendo así uno de sus sueños.

Para Luciano, el 11 de abril del 2013, representa una fecha muy especial,  ya que ese día llegó al mundo terrenal, Alejandro, su “precioso hijito”, como él lo suele llamar.

Debido a la situación que vivimos por causa de la pandemia, este 11 de abril la celebración dedicada a su hijo fue diferente, su inmenso amor paternal hizo que él ideara un cumpleaños inusual para su pequeño quien cumplía 7 años.

Comenta que la iniciativa nació cuando vio varias publicaciones en redes sociales sobre niños e hijos de compañeros policías que les daban un mensaje de QUÉDATE EN CASA, mediante un cartel.

Así, decidió preparar la sorpresa, tras organizarse e ingeniarse, y cuando al fin llegó el tan esperado día, se presentó como todo un héroe, portando un letrero donde le deseaba feliz cumpleaños, este detalle estuvo acompañado de un pastel, una caja de regalos, un bonete y una carta que decía:

“Hijito querido, pensaste que me olvidé de tu cumpleaños? Pues no hijito, tu padre está aquí para darte una sorpresa. Todo este tiempo te he  extrañado mucho y siempre te llevo en mi corazón y en mis oraciones. Recuerda que tu padre es un policía que trabaja con mucha mística y vocación de servir y proteger; por eso siempre recuerda esto mi precioso hijito ESTE DÓNDE ESTE, NO IMPORTA LAS CIRCUNSTANCIAS SIEMPRE VERÉ LAS MANERAS PARA BUSCARTE Y TE ENCONTRARÉ….».

Como personas sabemos que la unión familiar es una de las más grandes fortalezas, que muchas veces solo se puede representar con un abrazo, no obstante en este caso Luciano no puedo estrechar entre sus brazos a su hijo, quien de igual forma con emoción deseo abrazarlo.

Para el cabo primero de Policía su hijo siempre ha sido motivo de inspiración y por ello cada año agradece tener a esta bendición a su lado, por lo tanto no es la primera vez que expresa su cariño de esta manera, pues el año pasado se disfrazó de payaso y asistió a su escuela para darle la sorpresa.

Este es uno de los ejemplos que reflejan como todos los seres humanos estamos conectados a nuestra familia, personas por las cuales seríamos capaces de idear formas para sentirnos más unidos, como en este caso demostrando el amor incondicional de un padre a un hijo. DNCE/P. Pareja.