Dinapen capacitó a 48.790 estudiantes sobre acoso escolar

En la capital, la Policía Nacional, a través de la Dirección Nacional de la Policía Especializada en Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen), brinda un servicio de charlas en las instituciones educativas sobre el denominado ‘bulliyng’. El objetivo de estos talleres es socializar este problema social entre alumnos, maestros, directivos y padres de familia.

Era un año cualquiera, de un mes cualquiera, de un día cualquiera. Vilma (de nombre protegido) de 14 años, había perdido la noción del tiempo. No le importaba nada ni nadie. Sin embargo, escogió un martes para terminar con la tristeza y melancolía que agobiaba su vida.

En la mañana acudió a clases, pero no atendió a ninguna materia. La idea de suicidarse se apoderó de su cabeza y la hacía pensar de qué forma lo haría. ¿Con una correa? ¿Con un desinfectante? o con un cuchillo.

Mientras su mirada se perdía en el blanco pizarrón de tiza líquida, un golpe en la puerta de su clase la desconcentró. Se trataba de la capitán, Alexandra Benavides, jefe del Área de Capacitación de la Dirección Nacional de la Dinapen. Ella entró con un grupo de agentes y les indicó a los alumnos que les daría una charla sobre bullying.

La palabra le era familiar a Vilma, pero no sabía en sí de qué se trataba. Entonces, la oficial de Policía empezó con la explicación. Les indicó las alertas que deben tomar los jóvenes sobre este tema. Las palabras de la capitán cayeron como bendiciones para la joven. Al finalizar el taller de una hora y media, Vilma se le acercó a Benavides y preguntó si le podía ayudar.

La menor de edad le contó que en la noche se pensaba matar,  porque sus compañeros se burlaban de ella y que la seguían hasta en Facebook para hacerla sentir mal. Tal fue su grado de depresión, que pensaba que no tenía esperanza, hasta que llegó la Policía.

Después de varias terapias la joven pudo recuperar su autoestima y aprendió a no hacer caso de las ofensas de sus compañeros. Esta historia sirvió a la capitán Benavides para entender el fondo de este problema social y sus consecuencias.

El ‘bullying’ como tal no está legislado

Para Benavides, la palabra bullying es un término extranjero que, si es traducido, no tiene nada que ver con lo que hace referencia. Además, no está contemplado en la Constitución ecuatoriana como tal, sino con su término real que es acoso escolar.

Partiendo desde ese punto la Policía Nacional, a través de la Dinapen se preocupa por el bienestar de los niños y adolescentes del país. Por ello, desde hace tres años se preparó para iniciar estas charlas en escuelas y colegios de la capital.

Según las estadísticas de la Unidad de Estadística de la Dinapen, hasta noviembre de este año se han realizado 66.185 capacitaciones en toda la capital. De ellas, 48 790 son estudiantes, 1 464 fueron para profesores, 3 526 para padres de familia, al público en general, 5.805, al personal policial, 6 600.

Para el cabo Juan Carlos Samaniego, instructor de la capacitación, éstas consisten en mostrarles a los niños y jóvenes las consecuencias que puede ocasionar ponerle un apodo a una persona, por ejemplo. Los niños y jóvenes son el grupo más vulnerable de la sociedad y por su condición de inmadurez pueden tomar los comentarios de sus amigos de una manera inadecuada.

Las capacitaciones duran una hora y media y en ellas se muestran videos en los cuales aparecen entrevistas de niños que  estuvieron a punto de suicidarse y de padres de familia cuyos hijos fallecieron por culpa de “una broma”.

Samaniego cuenta que ahora las instituciones educativas se toman más en serio el problema del acoso escolar. “Ellos son los que nos buscan porque saben que una mala broma puede terminar en tragedia y eso desprestigiaría a su institución y más aún dejarían de ser un centro educativo”.

Bárbara Michelli, directora del Centro Educativo Alessandro Volta, señaló que es muy importante y plausible el trabajo que cumple la Policía Nacional con estas charlas. El acoso escolar es un problema de siempre, pero hoy toma mayor connotación porque las bromas llegan hasta la muerte.

Las confesiones por parte de los estudiantes son diversas y estremecedoras. El lunes anterior, mientras el cabo Samaniego dictaba una capacitación, uno de los niños contó que él, desde primero de básica, fue víctima de acoso porque era «gordito». Pero que nunca dijo nada a sus padres para no preocuparles y no interrumpirles en sus trabajos.

Para Humberto Saltos, abogado del Departamento Legal y Psicológico de la Dinapen, el 80% de los jóvenes acosadores es víctima de violencia en su casa, ya sea por sus padres o por sus hermanos y eso lo refleja en el aula con sus compañeros.

El jurista añade que según el Código de la Niñez y Adolescencia, los menores de edad pueden ser juzgados desde los 12 años. Antes de esa edad son inimputables. Las sanciones van, por ejemplo, desde barrer todo el colegio donde se produjo la agresión o ser internados en centros de orientación juvenil.

La lección que le dejó Vilma a la capitán Benavides fue tan fuerte que, en sus palabras, dijo “vine para algo a este mundo y creo que si no fuera por la charla, Vilma sería una estadística más”.

Contactos

Las instituciones educativas que deseen ser parte de esta iniciativa de la Dinapen pueden llamar a los números 023280899 o al 023280898. Min. Interior/ M. Rojas /DNCE